Los secadores de manos son ahora un equipo de vanguardia presente en todos los baños, capaces de secar las manos de forma rápida y eficaz. ¡Ha sido una revolución! Durante más de un siglo, varios inversores se han propuesto eliminar las toallas de papel mediante el uso de aire comprimido.
Las tendencias y la innovación avanzan constantemente, y esto se refleja en todos los aspectos de la vida. En el caso de los secadores de manos, cabe preguntarse sobre sus orígenes y cómo, gracias a su diseño brillante y moderno, han transformado la división. En los últimos años, los secadores de manos de alta velocidad, ecológicos y biodegradables han alcanzado una enorme popularidad.
Como ejemplo de lo lejos que ha llegado la tecnología, pensemos en los secadores de manos que aparecieron en la década de 1920. Los secadores de manos lentos y manuales ya no se fabrican porque los productos contemporáneos deben cumplir estrictas normas de nivel de ruido, velocidad y estándares de higiene.
George Clemens inventó el primer secador de manos oficial en 1949, pero tuvo que competir con la ineficiencia de las toallas de papel tradicionales y finalmente perdió. La alternativa rápida y sencilla al papel era demasiado buena para las máquinas grandes, ruidosas y lentas. Muchos de nuestros clientes están interesados en la eficiencia energética, especialmente aquellos del sector empresarial que desean reducir costos y su huella de carbono.
Los secadores de manos originales debían tocarse, lo que dispersaba las bacterias. Para solucionar este problema y evitar que los usuarios tocaran ninguna parte del dispositivo, se desarrollaron secadores de manos automáticos que funcionaban con un sensor. Un estudio reveló que el aire caliente del baño fomentaba la proliferación de bacterias.
A pesar de su elevado precio, el Dyson Airblade fue un secador de manos automático innovador y superior en su lanzamiento. En tan solo diez segundos, el Airblade puede secar las manos de forma eficaz y rápida.
Aunque el método de funcionamiento principal sigue siendo el mismo, los modelos contemporáneos incorporan características adicionales que mejoran su utilidad. Además, dado que no todos los diseños de baños se adaptan a los formatos convencionales de libros y cubos, el diseño de dispositivos ha cobrado mayor importancia.
A pesar de sus características modernas, los secadores de manos electrónicos aún tienen mucho en común con sus predecesores. El aire caliente es expulsado por un secador controlado por sensores mediante un mecanismo con mejores características de higiene, como filtros HEPA que atrapan bacterias y virus en el aire, tiempos de secado más rápidos y opciones ecológicas.
Desde su invención en la década de 1940, los secadores de manos han sido tendencia. Además, el sector del futuro parece aún más prometedor.
Uno de los avances clave en la tecnología de los secadores de manos es el aumento de la velocidad. El secado de manos es más rápido y eficiente que nunca gracias a la mejora de los secadores de alta velocidad, que pueden secar las manos en segundos. El desarrollo de nuevas tecnologías que consumen menos energía y son más respetuosas con el medio ambiente reduce la huella de carbono de los secadores de manos.
Una fascinante área de innovación son los sensores y otras tecnologías presentes en los secadores de manos. Por ejemplo, pocos secadores de manos modernos utilizan sensores para detectar cuándo una mano está debajo del dispositivo y se activan o desactivan automáticamente según sea necesario.